• El Brifin
  • Posts
  • Ya se pueden leer los pensamientos

Ya se pueden leer los pensamientos

Durante décadas, la imaginación humana ha soñado con un futuro sacado directamente de las páginas de la ciencia ficción y las pantallas del cine: carros que vuelan, teletransportación y poder controlar todo con la mente. Lo que alguna vez pareció inalcanzable, poco a poco se ve como algo a la vuelta de la esquina.

Se abre el telón

Aparece Neuralink, otra compañía de Elon Musk. Tío Elon anunció el lunes, a través de X, que su producto, llamado Telepathy, fue implantado en el cerebro de alguien —desconocido—, la persona está respondiendo muy bien, y los primeros resultados indican que el implante logra detectar impulsos neuronales.

¿De qué implante hablamos?

Hace 2 años, Neuralink creó un implante cerebral con el objetivo de que lea la actividad neuronal de personas con discapacidades motoras o que padezcan enfermedades que afecten el cuerpo y las ayude de alguna forma a ser más funcionales.

El dispositivo opera mediante un chip que se implanta y se sella directamente en el cerebro, asegurando un sello hermético. Este chip es alimentado por una batería que puede recargarse de manera inalámbrica, y no es posible remover el chip sin someterse a un procedimiento quirúrgico adicional. Todo el sistema se maneja mediante la interpretación de ondas cerebrales

El chip está conectado a una red de electrodos —conductores de electricidad— diminutos, más finitos que una hebra de cabello, que se colocan estratégicamente para registrar la actividad neuronal en áreas específicas del cerebro y lograr cosas, sobre todo motoras.

Por el amor al prójimo

Y por la telepatía. Neuralink explicó que el chip primero va dirigido a las personas con Esclerosis Lateral Amiotrófica (ELA, conocida como enfermedad de Lou Gehrig) y a otras personas que perdieron el control de sus extremidades. Luego se van a dirigir a personas con problemas mayores, y por último, Musk tiene la esperanza de poder hacer que la gente se comunique telepáticamente y tengan Telepathy como parte de su vida cotidiana.

Todo muy chulo pero…

Aunque esta tecnología suena como una maravilla, se plantean varios conflictos éticos que tiene a la gente viendo todo con lupa. Por ejemplo:

  • Neuralink estuvo involucrada en ensayos que supuestamente resultaron en la muerte de alrededor de 1,500 animales, y la empresa informó que hubo «posibles» daños a la salud, como parálisis, convulsiones e inflamación cerebral en experimentos anteriores.

  • Hay gente preocupada por la posibilidad de que en el futuro se puedan leer los pensamientos de las personas y apareció la conversación sobre la ética de la privacidad mental, conocida como «neuroderechos».

  • El costo del implante se estima en 40,000 dólares, y eso abre preguntas sobre el acceso equitativo a esta tecnología. 

  • La necesidad real de este tipo de tecnología también es un tema, especialmente cuando existen otras formas de comunicación y control de dispositivos, como comandos de voz y software de seguimiento ocular.

Al mismo tiempo, aunque ya tienen la aprobación de la Administración de Alimentos y Medicamentos (FDA) de EE. UU. para estudios en humanos, la misma empresa aseguró que, aunque el implante salió bien y todo parece estar bien, los resultados verdaderos se sabrán a largo plazo. Todavía no se sabe si el implante funciona correctamente.

Tío Elon no es el único en esto

Varias otras empresas están explorando tecnologías similares. Por ejemplo, École Polytechnique Fédérale de Lausanne (EPFL), en Suiza, ha logró una interfaz que permitió a un hombre paralizado caminar mediante implantes electrónicos en el cerebro y la columna; también Blackrock Neurotech, implantó la primera de sus interfaces en el 2004, similar a la idea de Neuralink, y su filosofía está centrada en el desarrollo de tecnologías para ayudar a personas con parálisis.

También otras empresas, como Synchron y Precision Neuroscience (que es de un cofundador de Neuralink) están trabajando en chips como el de Neuralink para ayudar a personas con parálisis. Synchron lo está haciendo con un dispositivo del tamaño de un botón y Precision Neuroscience con un implante delgado que se coloca en la superficie del cerebro.

Innovación responsable

Mientras más nos acercamos a momentos donde la ficción se convierte en realidad gracias a tecnologías como la de Neuralink, enfrentamos el doble filo de la innovación. Es crucial que nuestra marcha hacia adelante se guíe por la ética, pero no siempre hemos sido buenos en eso. El verdadero éxito de la tecnología se mide no solo por lo que logra, sino por cómo enriquece la vida de cada persona.

Fuentes consultadas

Join the conversation

or to participate.