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Partiendo y repartiendo
¿Qué es un partido?
Son organizaciones políticas que presentan candidatos en todos los procesos electorales del país. La idea es que los partidos sirven para que los ciudadanos puedan participar en la política y así mantener la dichosa democracia viva.
Si nos vamos un chin en historia es interesante saber que el primer partido político reconocido durante la época democrática fue el Partido Revolucionario Dominicano que se creó en Cuba, en 1939, con Juan Bosch, Juan Isidro Jiménez, Angel Miolán y otros a la cabeza, buscando cómo salir de Trujillo y luchar por la democracia del país —todo eso desde el exilio—.
En 1961, después de la muerte de Trujillo, llegaron al país Angel Miolán, Nicolás Silfa y Ramón Castillo, para organizar el partido en República Dominicana. Más tarde apareció en el juego Juan Bosch, que se postuló en las elecciones de 1962, asumió el poder en 1963 y siete meses después terminó derrocado por un golpe de estado.
Actualmente, ¿cuántos partidos hay en el país?
Nosotros tenemos aproximadamente 35 partidos reconocidos por la Junta Central Electoral, y de esos, solamente 3 son mayoritarios —Partido Revolucionario Moderno (PRM); Partido de la Liberación Dominicana (PLD); Fuerza del Pueblo (FP)— y los demás casi como sus followers. Según la Ley Electoral 275-97, para que un partido se considere mayoritario tiene que tener al menos un 5% de los votos válidos en las elecciones presidenciales.
El partido mayorista con mayor tiempo dando vueltas es el PLD, que fue fundado por Juan Bosch en 1973 después de que entendió que el PRD «ya no era igual y se había separado de los principios éticos de la política».
Después está el PRM, que nació en el 2014 después de una temporada turbia en el PRD que tuvo hasta un famoso lío de sillazos. En esa fractura del partido, Abinader e Hipólito se salieron del PRD y fundaron el PRM, y hasta bien les salió porque en el 2020 fueron el partido más votado en todos los niveles.
Y por último está la Fuerza del Pueblo de Leonel, que surgió después de todo el lío del fraude electoral en el 2019, cuando Leonel se quitó del PLD y transformó el que antes era el Partido de los Trabajadores Dominicanos (PTD), convirtiéndolo en FP.
Ahora los partidos minoritarios
Aunque hay 3 matatanes que todos conocemos, hay otros partidos que también aparecen en el medio y que hasta hacen ruido en las elecciones sin ser los mayoritarios. Algunos de ellos son parte de bloques políticos —que se unen para apoyar a un partido mayoritario— y otros simplemente siguen a flote solitos. A la mayoría de estos partidos pequeños no les interesa ser más grandes, sino ser «partidos bisagra», que son los que siempre apoyan al que creen que va a ganar a cambio de una pequeña tajada en el Estado.
Entre los solteros están:
El Partido Reformista Social Cristiano (PRSC) fue fundado por Balaguer en 1963 mientras todavía estaba exiliado, y es el mismo partido que lo llevó a la presidencia en 1966 por primera vez.
Partido Revolucionario Dominicano (PRD), que fue por mucho tiempo el principal partido opositor y además gobernó 3 veces.
Alianza País (ALPAIS), fue fundado en 2011 por Guillermo Moreno.
Opción Democrática, fundado en 2015 por Minou Tavárez Mirabal.
Partido Revolucionario Social Demócrata (PRSD), que nació en 2005 con Hatuey De Camps.
Y los bloques:
Bloque Progresista: Es como un sancocho de 12 partidos aliados al PLD y que nació a partir de las elecciones congresuales del 2006. Actualmente, es el bloque con más partidos y el que mayor fuerza tiene.
Bloque Convergencia para un Mejor País: Es como la contraparte chiquita del Bloque Progresista. Nació en 2016 para enfrentar al BP aliándose al PRM. Este bloque nada más tiene 3 partidos aparte del PRM —Partido Humanista Dominicano (PHD); Partido Dominicanos por el Cambio (DxC); Frente Amplio
¿Cuáles son los requisitos para formar un partido?
Formar un partido sale sencillo porque básicamente cualquiera puede hacerlo, pero que la Junta Central Electoral reconozca ese partido ya son otros 500.
El proceso, según la JCE, consta de 10 requisitos que tienen que cumplirse según la Ley 33-18:
Llevar una instancia de solicitud de reconocimiento a la JCE, dirigida hacia el presidente y los honorables miembros.
Nombrar y exponer los propósitos, principios y lineamientos del partido.
Especificar los estatutos del partido y cuáles son las reglas de funcionamiento —que tienen que estar acorde a los principios democráticos que señala la Constitución—.
Señalar quiénes son los cabeza de equipo, incluyendo los comités o juntas directivas provisionales.
Descripción del nombre y lema del partido.
Dibujos del logo, símbolo o emblema del partido.
Llevar al JCE una declaración jurada de que todos los miembros son ciudadanos que aceptan estar con su firma.
Tener la sede establecida en el Distrito Nacional o en Santo Domingo pero en zona urbana.
Una declaración de los organizadores donde conste que el partido tiene organismos de dirección provisionales operando y funcionando en, por los menos, cada uno de los municipios.
El presupuesto de ingresos y gastos del partido durante el proceso de organización y reconocimiento, con indicación detallada de los aportes recibidos y sus fuentes.
El presupuesto de ingresos y gastos del partido hasta la fecha de las próximas elecciones generales con indicación detallada de las fuentes de los ingresos.
¿Y un partido creado puede desaparecer?
Un partido es casi como un matrimonio. Firman para estar juntos, se juran amor y lealtad y ahí van caminando juntos por la vida; pero también puede llegar el divorcio y por diversas causas.
Los partidos pueden «caer en el olvido» y ser «cerrados» por la JCE si no obtienen por lo menos un 1% de los votos en las últimas elecciones nacionales ordinarias; si no hay representación congresual en las últimas elecciones generales; si no participan en dos elecciones ordinarias sucesivas; si se fusionan con otro partido; o simplemente porque las partes quisieron separarse y por acto voluntario presentan su disolución a la JCE.
¿El Estado está obligado a darle dinero a un partido nuevo?
Según la Ley 33-18, el Estado contribuye con el patrimonio de los partidos «en la forma y proporción establecidas por la ley y la legislación electoral vigente».
En esa misma ley, en el artículo 61, se establece que los recursos económicos del Estado se distribuyen a los partidos de la siguiente forma:
Un 80% se reparte en partes iguales a todos los partidos que tengan más del 5% de los votos válidos en las últimas elecciones —los mayoritarios—.
Un 12% se entrega a los partidos que hayan alcanzado más del 1% y menos del 5%.
Un 8% se entrega a los partidos que hayan alcanzado entre 0.01% y 1% de los votos válidos en las últimas elecciones.
Entonces con ese dinero hacen lo que quieran
En teoría no. Los recursos del Estado tienen que invertirse en cosas específicas y están detalladas en la misma ley.
10% o más tiene que destinarse para los gastos de educación y capacitación.
50% es para cubrir gastos administrativos.
40% tiene que usarse para apoyar las candidaturas de manera proporcional en todo el país.
¿Son demasiados?
Depende. Si uno lo compara con Estados Unidos, donde hay 2 partidos (demócrata y republicano) que dominan la escena desde hace todos los años del mundo, entonces son demasiados. Pero hay países desarrollados, como Países Bajos o Bélgica, donde la cantidad de partidos es similar o incluso mayor. En el contexto de Latinoamérica y el Caribe, el número de partidos no es realmente excesivo.
El problema es cuando surgen partidos que simplemente buscan pegarse de los grandes para hacer «negocio», y no para aportar a la diversidad y competitividad que forma parte de la esencia de un sistema democrático. Que con sus fallas y falencias, al menos tenemos uno que funciona.
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