¡Buenos días!
Hoy es viernes 30 de mayo

Un día como hoy en 1961, un grupo de hombres le dijeron «ya ta bueno» a Trujillo. Pero más que recordar su ajusticiamiento, vale la pena pensar en lo que todavía queda vivo de aquello. Porque un dictador puede morir ajusticiado, pero una cultura autoritaria se muere con educación, con memoria y con gente que no se canse de hacer preguntas incómodas.

Pero, ¿y mis cuartos?

Con todo lo que está pasando este año a nivel económico, especialmente con los aranceles de Trump y el tambaleo de los mercados porque hoy salta con una cosa y mañana con otra, uno se enfoca en cómo afectará todo esto a lo que tiene en la mano: el bolsillo, el negocio, la tarjeta, la gasolina… Pero como que nadie (bueno, algunos sí) se ha detenido a ver qué está pasando con un dinero que también es suyo, pero que no se verá ahora sino cuando se retire: el fondo de pensiones.

¿Qué pasa con eso?

Si chequeas religiosamente la aplicación o el estado mensual que te manda tu AFP para ver cómo va tu dinero, habrás visto que en abril hubo un bajón en la rentabilidad. Y no es para asustarte, pero el mes cierra mañana y según las proyecciones (porque diariamente se puede ver el comportamiento de los rendimientos) parece que cerrará peor.

¿Cómo?

OK, empecemos por el principio. Si tienes un salario, tú sabes que cada mes una parte de lo que te pagan se va a tu fondo de pensiones (tú pones una parte, y tu empresa otra); ese es un dinero que solo podrás retirar cuando tengas un reguero de años trabajando y tengas cierta edad. El asunto es que desde hace más de 20 años existen las AFP, que agarran ese dinero tuyo y lo invierten para que se convierta en más. ¿Dónde lo ponen? En lo que se llaman «instrumentos financieros», como bonos, fondos de inversión, certificados del Banco Central, y así sucesivamente.

El asunto es que cada mes, tu AFP te dice cuánto te estás «ganando» con ese dinero que ellos invirtieron. En abril, por ejemplo, fue un 9.4% en promedio entre todas las AFP. Eso no quiere decir que en abril tu fondo acumulado creció un 9.4%, sino que si el año entero se mantiene como ese mes, terminarás con un 9.4% más. Por ejemplo, si empezaste el año con 1 millón de pesos en tu fondo, en año nuevo tendrás 1,094,000 pesos. Si la rentabilidad baja —poniendo un ejemplo— a 5% en mayo, no quiere decir que perdiste dinero, sino que en vez de ganarte 94 mil (si el año entero es como mayo), te ganarás 50 mil.

No siempre es igual

Aquí es donde está el «kí» del asunto. A diferencia de un instrumento de renta fija, como un certificado en un banco o una cuenta en un fondo de inversiones que te da un retorno fijo, el rendimiento de los fondos de pensiones sí puede variar. Eso quiere decir que la rentabilidad, o el dinero adicional que genera tu dinero después de ser invertido, depende de cómo le vaya a los mercados y a los instrumentos esos en lo que tu AFP está metiendo tus cuartos. 

Ahora mismo estamos en un momento que no es el mejor, pero tampoco es el peor. La rentabilidad ha venido bajando por varias razones, incluyendo una inesperada: la tasa del dólar. Mientras en muchos sentidos conviene que baje el dólar, para los fondos de pensiones no necesariamente es así. Y lo que pasa es que una parte (máximo un 30%) de lo que tienes en tu fondo es en dólares, pero la ley exige que se refleje en pesos. Entonces, pon tú que en tu fondo haya 5 mil dólares. Si el dólar está a 60, se reflejan 300 mil pesos; si baja a 50, verás 250 mil pesos. Como ha bajado el dólar en los últimos meses, eso le ha dado duro a la rentabilidad que ves reflejada.

El juego es a 9 innings

Esta es la buena noticia. Hay meses y años buenos y malos, y la rentabilidad de las pensiones ha llegado a estar tan alta como un 15 o 16%, y tan baja como un 4 o 5%. Pero como este dinero no lo cobrarás ahora sino cuando te retires, lo importante es la rentabilidad promedio en el tiempo. 

Ahí es donde las AFP sacan el pechito, porque la rentabilidad promedio en los 20 años que tienen en esto es de 9.4% (casualmente, lo mismo que está dando en abril), y ellos dicen que ese número es más alto que cualquiera de los instrumentos financieros que hay disponibles en el país en ese mismo período de tiempo, y mucho más alto que el promedio de América Latina.

La mala noticia es que si vemos el gráfico de la rentabilidad de los últimos 15 años, no hay que ser un matemático para darse cuenta de que la tendencia es hacia abajo

No perdamos la costumbre

Vamos con dos noticias buenas, una de salud y una de economía:

¡Salud, que hoy es viernes!

Unos científicos brasileños dieron con una molécula que podría cambiar completamente la manera en cómo la ciencia trata el Alzheimer y la demencia. Se llama hevina, y es una proteína producida por los astrocitos (unas células cerebrales en forma de estrella que ayudan a las neuronas a comunicarse) que en unos ensayos en ratones logró echar para atrás el deterioro cognitivo asociado con estas enfermedades.

Lo que hicieron fue usar un virus modificado para que el cerebro de los ratones produjera más hevina, y notaron que mejoraron muchísimo en pruebas de memoria y aprendizaje. Lo curioso de eso es que el cambio se dio sin que se alteraran las placas amiloides, que son vistas tradicionalmente como las culpables del Alzheimer. Esto le da más fuerza a una teoría que ha cogido peso: que las placas son síntomas de la demencia, no la causa; y que el verdadero problema puede estar en las conexiones neuronales rotas.

Todavía no estamos cerca de la cura. Hay que ver si funcionará en humanos, ver cómo se puede hacer que la molécula cruce la barrera protectora del cerebro sin perder fuerza, y además ver si se puede convertir la hevina en un medicamento. Pero la buena noticia es que quizás la solución no está donde siempre se ha buscado. Se estima que unos 50 millones de personas viven con demencia, y el número podría triplicarse para el 2050.

Plata sí es

El precio del oro está por las nubes, y eso es una bendición para RD. Solo entre enero y abril del 2025, los impuestos mineros generaron 11,208 millones de pesos para el Estado dominicano. Eso es casi lo mismo que en todo el 2024 y tres veces más que el 2023. Es verdad que la producción de oro ha caído por los líos con la presa de cola, pero el precio está tan alto que se ha traducido en mucho más dinero. Para que tengas una idea, el presupuesto del 2025 había contemplado la onza del oro en 2548 dólares, y en abril llegó a 3207.

Otra cosa es que la Barrick estuvo descontando entre el 2022 y el 2024 los 8 mil millones de pesos en impuestos adelantados que le dio al gobierno en la pandemia. Así que por más que se vendiera, una parte se le estuvo devolviendo durante esos años. Pero ya las devoluciones terminaron y entra todo limpio. Si el ritmo y el precio se mantienen, el 2025 cerraría con unos 20 mil millones solo en impuestos de minería.

Imagen del día

La cifra del día

70%

El porcentaje de todas las denuncias que llegan a Pro Consumidor que vienen del sector construcción. Ahí entran líos como fraudes, vicios ocultos y cláusulas abusivas. Algunos son más serios que otros, y de hecho en los últimos meses han mandado más de 60 expedientes por estafa al Ministerio Público.

Brifipedia

A capela: Casi todo el mundo sabe que esto significa ‘sin acompañamiento instrumental’. Es decir, se usa para describir el acto de cantar solo con la voz, sin música de fondo. Pero lo que no todo el mundo sabe es que es la forma adaptada al español de la expresión italiana a cappella, que literalmente quiere decir «al estilo de la capilla».

Se dice así porque en la liturgia cristiana antigua (o sea, el conjunto de rituales religiosos), la música se hacía a garganta limpia, sin instrumentos. Por cierto, no se debe escribir ni ‘a cappella’ ni ‘a capella’.